Salmos 124:7-8 “Escapamos como un pájaro de la trampa del cazador; ¡la trampa se rompió y somos libres! Nuestra ayuda viene del Señor, quien hizo el cielo y la tierra”.
Si te sentís como en una trampa por haberte desviado de los caminos de Dios, hoy es el día para que la trampa se rompa y seas libre del cazador, el diablo.

Dios desea guiarte por caminos de vida, bienestar, bendición, sanidad. ¡Pedíle ahora por tu libertad!

Orá así: Padre Dios, te pido perdón por haber seguido mi propio camino. ¡Líbrame de las trampas en que he caído! Decido seguir a Jesús. En Su Nombre, amén.
¡Bendecido Domingo!